martes, 10 de febrero de 2009

Déjame verte

A veces me vuelvo a parar en el tunel, en aquella cueva, en la penumbra. Anduve sin rumbo en la oscuridad desde aquellos dias en los que la soledad me congelaba el alma.

Una vez vislumbre una luz a lo lejos y hacia ella avancé, con la esperanza de que alumbrara mi tristeza y mi melancolía, con la esperanza de que deseara compartir su luz con la mia, y me encontré un hermoso lobo, un lobo con el que compartí instantes ciertos y eternos como aquellas estrellas que vimos en el firmamento, dos corazones rotos rozaron el cielo durante aquellos dias fuera del tiempo. Luego se marchó a recorrer el mundo, ahora le guardo con cariño en mi recuerdo.

Entonces me sentí viva y avancé, y crecí, yo sé que lo hice, aunque a veces me olvide. Me sentí más que nunca, me quise y me odié más nunca, y caminé, caminé hacia la nada, hacia el todo..

Ahora volví a ver otra luz, creo haberla visto, a veces pienso que es real, otras en cambio, sólo un reflejo. Y en el camino me pierdo, porque sé que lo intento pero es en vano mi esfuerzo si te escondes cuando me acerco. Haz que tu luz brille si quieres que te encuentre, ayudame a sentirte para luego amarte. Esta es mi parte, mi alma pide paz, mi cuerpo sexo, y mi mente... dejame verte, desnuda tu alma y tu mente para conocerte, y seré tu confidente.

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